SURGIMIENTO DEL CAMPISMO POPULAR

El Campismo es una modalidad turística muy practicada en el mundo desde los finales de la Segunda Guerra Mundial, cuando se pusieron a disposición de los amantes de la recreación al aire libre, gran cantidad de tiendas de lona, cantimploras y otros medios. En Cuba no se había desarrollado una práctica masiva, aunque varias organizaciones, grupos de estudiantes e individuos de la población, propiciaban un acercamiento a los valores del entorno, aprovechando libremente las bondades del clima y el paisaje en general.

En septiembre de 1959, mientras recorría la Hacienda Cortina, hoy Parque Nacional de La Güira en la Sierra de los Órganos, en Pinar del Río, provincia privilegiada por su Naturaleza, el Comandante en Jefe Fidel Castro fue impactado por la belleza de aquel entorno, y entonces sugirió la idea de extender por valles, playas y montañas, una forma de alojamiento y disfrute al alcance de todos los cubanos.

Esta idea no se pudo materializar de inmediato por cuanto los esfuerzos de la naciente Revolución se enfocaron en el alcance y consolidación de muchos objetivos. En abril de 1981, veintidós años después, se dieron los primeros pasos, bajo la propia orientación del Comandante en Jefe, para organizar un plan masivo de acercamiento del pueblo a la Naturaleza, mediante la recreación. Así surge la idea del Campismo Popular, como una vía saludable de garantizar las vacaciones del pueblo trabajador.

Con sano orgullo acogió la Unión de Jóvenes Comunistas el cumplimiento de esta tarea, la llevó adelante, la impulsó y a finales de ese propio mes, se efectuaron los primeros recorridos por la provincia de Pinar del Río, con el propósito de explotar las zonas naturales que mayores condiciones ofrecían para el desarrollo de esta actividad. Se seleccionaron alrededor de 10 lugares y de inmediato, se comenzó a trabajar para asegurar su éxito, sobre la base de los siguientes principios:

  • Escoger lugares naturales con las condiciones idóneas, próximos a valles, cuevas, elevaciones, bosques y ríos, para crear en ellos las facilidades mínimas, para la acampada y recreación de los excursionistas.
  • Seleccionar terrenos con características topográficas para acampar, con posibilidades mínimas de acceso (viales), la inexistencia de plagas, el respeto a las Zonas Protegidas, la existencia de agua potable y las posibilidades de áreas de baño recreativo.
  • Realizar inversiones económicas de acuerdo con las posibilidades del país.
  • El plan no tendría como objetivo la obtención de ganancias, sino que sólo resultara costeable, es decir, que se cubrieran los gastos con los ingresos.
  • Debían fijarse precios módicos al alcance de la población, de manera que se propiciara una participación masiva en esta nueva forma de recreación.
  • La concepción y práctica del Campismo Popular debía integrarse en forma positiva, a la campaña que ya venía realizándose dirigida a la creación de una Cultura de la Naturaleza.

Comenzó así el proceso constructivo, y mientras tanto, en la Ciudad de La Habana, que fue el mercado seleccionado para la oferta del nuevo producto, en su fase experimental, se trabajaba en la promoción y en la investigación, a través de contactos efectuados con varios colectivos juveniles que arrojaron resultados positivos.

De varias consultas a organismos e instituciones como el INDER, el INTUR, el IPF, el MINSAP, la Academia de Ciencias y otros, con cierto conocimiento y experiencia en esta actividad, surgieron las orientaciones para normar, de manera provisional, el funcionamiento y las actividades, de las distintas dependencias del Plan.

El 16 de mayo de 1981 se efectuó, en horas tempranas de la mañana, el arribo a las seis Bases de Campismo de los primeros ómnibus con excursionistas procedentes de varios municipios de Ciudad de La Habana y de la provincia sede. Se habían creado alrededor de 2 400 capacidades y al cierre del mes de agosto de ese año, un total de 13 630 cubanos las visitaron.

Gracias a la entrega y consagración de todos los involucrados en este proyecto, en solo 42 días, entre el 4 de Abril -día en que la UJC recibió el encargo de nuestro Comandante en Jefe- y éste de la inauguración, se organizó, aseguró y empezó a materializar, esta importantísima iniciativa de la Recreación a favor de la Cultura de la Naturaleza.

Mascotas del Campismo